- Mas de 100 mdp es la inversión del corporativo que no violentará las fachadas
- Hasta el momento no hay quejas ni reclamos ciudadanos por la trasformación de la emblemática casona.
El inmueble que albergó al Molino de la Asunción en San Martín Texmelucan será sede de una tienda departamental que generará más de 200 empleos directos con una inversión de más de 100 millones de pesos, sobre una construcción de 1 mil 700 metros cuadrados de construcción.
El corporativo trabaja día y noche para terminar la obra el 20 de octubre y ofrecer todos los servicios que ofrece la empresa Coppel en el país y se sabe que construye una tienda departamental de dos plantas, en el inmueble ubicado en la calle Profesor Florencio Espinoza, en el primer cuadro de la ciudad.
Una parte del inmueble, originalmente propiedad de la Familia Escobedo Gutiérrez fue vendido a un corporativo y a otra parte permanecerá en propiedad de la citada familia.
La casona conocida coloquialmente como el Molino de la Asunción exhibe en su fachada una lona de licencia mayor, con escudos del gobierno del estado que habla de adecuación y mantenimiento general, especificando que se trata del alineamiento 1648, con una licencia de uso de suelo No.0639, de construcción No. 0703 y también informa que el perito responsable de la obra No. 1123/84 es el Arquitecto J. Luis A. Galicia Osorio.
Informa también que el corresponsable en la restauración es Neptuno Cinco S. A. de C. V. y con una vigencia de mayo a diciembre de 2017.
En otra lona exhibe perfectamente visibles la licencia de obra del INAH, correspondiente a los monumentos históricos No. 401.3S 1 2017/1549.
La maquinaria y muchas cosas del equipamiento del molino se la llevo la harinera de México cuando vendió el inmueble, y a decir del regidor Marco Antonio Escobedo Gutiérrez, cuya familia adquirió hace algunos años la propiedad de dicho molino, es de la década de los 50`S.
En relación con la fachada, del inmueble que albergó la primera empresa harinera en San Martín, el servidor público aseguró que se ha respetado, hasta este momento, todos los candados y lineamientos emitidos por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)
De la citada propiedad, una parte fue vendida por la familia y la otra permanece en propiedad de ellos mismos, en donde próximamente se habilitará un restaurante y un hotel boutique, respetando la construcción de la casona y con el ánimo de impulsar la reactivación económica a través del turismo.
A decir de Marco Antonio Escobedo, San Martín Texmelucan no es una ciudad colonial con alto valor histórico, y al recordar que el perfil de la ciudad, con su productividad, ahora contará con una inversión que generará modernidad, derrama económica, servicios, y un buen número de empleos para la región.
Recordó que, en los últimos 15 años, más de 25 empresas importantes, sin citar los nombres, han cerrado sus puertas, generando despidos masivos de empleados y obreros, por ello insistió en reconocer la importancia de invertirle al negocio formal.
Benjamín García Noé, Director de Desarrollo Urbano confirmó que el corporativo cuenta con todos los trámites y permisos legales, para alineamiento, uso de suelo, números oficiales, permisos de construcción, ante la comuna, para realizar sus obras y aseveró que el ingreso a la tesorería municipal fue por alrededor de 50 mil pesos por cada licencia, en referencia también a la construcción de la bodega de Elektra que se realiza en la Plaza Crystal.
También confirmó que hasta el momento no ha habido negativas o reclamos ciudadanos por las modificaciones a un edificio emblemático en la ciudad.
De acuerdo con la revisión histórica, El molino La Asunción fue fundado en 1884 por Roberto Bazinger. Uno de los edificios más antiguos de San Martín Texmelucan, instalado en terrenos del costado izquierdo-trasero del templo de la Parroquia de San Martín Obispo, llegó a ser uno de los molinos de trigo más importantes del país.
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