viernes, 17 de octubre de 2025

Reflexión - ¡Déjate abrazar!

 



Por: Pbro. Gustavo Herrera. 

Muchas veces en la vida tomamos el rol de los “súper héroes” y nos convertimos en las personas fuertes que nos dedicamos a dar ánimo y seguridad a los demás, pero se nos olvida que nosotros también somos humanos, débiles y con limitaciones, y que no siempre podremos solucionar todos los problemas que se van presentando en la vida.

Creemos que si yo me doblo ante las adversidades, todo se viene abajo.

Hoy te invito a que pongas los pies sobre la tierra y te des cuenta que no todo gira a tu alrededor, sino que también existen otras personas que pueden ayudar, con sus cualidades y habilidades, a superar las situaciones difíciles que se van haciendo presente en nuestra vida.

Date cuenta que no eres la única persona que puede abrazar, consolar y dar fortaleza al otro, sino que, muchas veces, también nosotros necesitamos unos brazos que nos rodeen, dándonos confort y seguridad.

Déjate abrazar y sentir que no estás solo. Siente el amor, cariño y estima de los demás y no te niegues a aceptar su ayuda.

Recuerda que nadie da lo que no tiene y que, para poder abrazar y ser el sostén de muchos, también debemos sentirnos queridos y saber que existen otras personas que nos apoyan y están siempre a nuestro lado para darnos ánimo y confianza.

Si queremos ser la fortaleza y el sostén de nuestros seres queridos, debemos reconocer que, también nosotros, somos personas con sentimientos y vulnerabilidades, por lo tanto, en determinado momento, necesitamos que nos apapachen y consientan.

El dejarte abrazar y sentir la proteccion del otro no es signo de debilidad, sino de humanidad.

Nunca olvides que eres un ser humano, como cualquiera, con roles y responsabilidades propias, donde, muchas veces, debes ser fortaleza y sostén de muchos, pero, que, también, tienes limitaciones y sentimientos, por lo que, muchas veces, necesitarás del apoyo de personas que te quieran y te den tranquilidad y seguridad.

Abraza y da seguridad a tus seres queridos, pero, espero que eso no te impida dejarte abrazar y sentir el amor de las personas que te quieren y estiman.


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