El activista permaneció por lo menos dos meses bajo el agua en un pozo cercano a un salón de usos múltiples en el centro comunitario de Xitacamaxtitlan.
Aunque la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y la Fiscalía Especializada en Desaparición Forzada reportaron la localización sin vida del activista, continúan las investigaciones.
Los residentes de la comunidad informaron del descubrimiento la noche del lunes 10 de marzo, en circunstancias inusuales.
A decir de testigos, un grupo de niños se encontraba jugando en la zona del centro comunitario, cerca del pozo donde vieron el cuerpo.
Según la versión oficial del hallazgo, los niños avisaron a sus papás. Poco después se confirmó que el cuerpo correspondía al activista muerto, Mario Alberto Leal, reportado como desparecido ante las autoridades de Puebla.
Sin embargo, al momento del rescate del cuerpo, para el que se usaron cuerdas y poleas, los restos del activista se encontraban en perfecto estado. Cabe mencionar que no había grado de descomposición correspondiente a dos meses bajo el agua.
También sus pertenencias, como cartera, llaveros y demás objetos encontrados en su ropa, no contaban con desgaste relacionado a dos meses que tenía reportado como desaparecido.
El Servicio Médico Forense (Semefo) de Chignahuapan recuperó el cuerpo y lo entregó a sus familiares.
Mario Alberto era integrante de la organización por el territorio Onodet
Como PÁGINA NEGRA informó, la desaparición de Mario Alberto Leal Larios se reportó desde el 2 de enero en Ixtacamaxtitlán.
El activista de 22 años era integrante de la Organización Nacional de Comités de Ordenamiento y Defensa del Territorio (Onodet).
La víctima se encontraba en un baile de la comunidad de Tentzoncuahuigtic, debido a que formaba parte de un grupo musical. La Banda conocida como “Ritmo Romano” es una de las más conocidas de la región.
En ese entonces se realizó una fuerte movilización para dar con el activista. Sin embargo, a pesar de la intensa búsqueda en las zonas aledañas al municipio de Ixtacamaxtitlán y por la Sierra Norte de Puebla, no se logró dar con su paradero.
El pasado 4 de enero, después de que se cumplieron 48 horas de la desaparición del activista, la Comisión de Búsqueda publicó un boletín para localizarlo.
Asimismo, la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas inició la carpeta de investigación FGEP/CDI/FEIDDFDCP/HUACHI-I/00006/2025.
Hasta el momento, se desconoce si la desaparición y muerte de Mario Alberto Leal Larios está relacionada con su activismo. O bien, si tuvo algún altercado en el evento que derivó en su muerte.
La Onodet, organización a la que pertenece Mario Alberto, se encarga de reunir comités que luchan por la defensa de los territorios.
Cabe mencionar que la organización aún no presenta un comunicado por el hallazgo del activista localizado muerto en Ixtacamaxtitlan, Puebla.
Con información de: Periódico Central
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