De acuerdo con José Juan Sánchez Martínez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), la tendencia a la baja ha impactado tanto a negocios consolidados como a nuevos emprendimientos, especialmente en zonas del municipio de Puebla, como Angelópolis, La Paz y Huexotitla.
El dirigente explicó en entrevista, en el marco del anuncio de la Feria de Industrias Creativas, organizada por la Cámara Nacional de Artes Gráficas (Canagraf), que la menor afluencia de comensales y la reducción en el ticket promedio han sido factores determinantes en la caída de ventas, las cuales descendieron entre 15 y 25 puntos porcentuales.
Añadió que algunos de los negocios que han cerrado eran reconocidos en la ciudad, pero rechazó revelar los nombres, mientras que otros eran proyectos recientes que no lograron sostenerse ante el contexto económico.
La Canirac ha identificado que la demanda en restaurantes ha disminuido porque el gasto en alimentos preparados dejó de ser prioritario para muchas familias.
En Puebla, donde existen más de un millón de consumidores, la preferencia por opciones más económicas o el consumo en casa ha influido en el descenso de ingresos para el sector.
Sánchez Martínez señaló que la próxima temporada del chile en nogada representa una oportunidad clave para la recuperación económica de los restaurantes. El año pasado, se vendieron cerca de 4 millones de piezas en todo el estado, lo que benefició no solo a los establecimientos, sino también a mercados y productores del campo poblano.
El representante de la Canirac indicó que algunos restaurantes han logrado adaptarse a las nuevas tendencias, como los pequeños negocios con entre 10 y 15 mesas, pero los grandes locales, acostumbrados a recibir hasta 100 comensales, han visto reducida su clientela de forma significativa.
“Esta temporada del chile en nogada es una de nuestras más importantes en derrama económica”, subrayó. Destacó que el platillo debe cumplir con características como estar capeado, ser de temporalidad y llevar ingredientes endémicos del Iztapopo y del campo local.
José Juan Sánchez añadió que aunque la temporada de graduaciones suele aportar ingresos adicionales, el impacto es mayor para salones de fiestas que para restaurantes. Por ello, la expectativa del sector que representa está puesta en la comercialización del platillo típico poblano, que podría ayudar a estabilizar las finanzas tras meses de ventas bajas.
La organización empresarial continúa buscando estrategias y promociones para atraer visitantes y turistas interesados en la gastronomía poblana. El objetivo es fortalecer el sector y mantener su competitividad, pese al contexto económico actual.
Con información de: La Jornada de Oriente
No hay comentarios:
Publicar un comentario