Sin estímulos fiscales del gobierno federal y sin alza en la productividad, la jornada laboral reducida de 40 horas provocaría en México incremento en el precio de productos y servicios, vaticinó José Darío Zamorano Mendoza, presidente del Colegio de Contadores Público del Estado de Puebla (CCPEP).
En conferencia de prensa, comentó que aun cuando los foros para las modificaciones a la Ley Federal del Trabajo se llevarán a cabo hasta julio próximo, es prácticamente un hecho que se aprobará la reforma laboral, por lo que desde este momento las empresas deben comenzar a prepararse para el cambio.
No obstante, indicó que si no hay apoyos de la Federación, como pudiera ser la deducción total de los salarios, es muy probable que el impacto económico se traslade a los consumidores finales, aunque no estimó en qué porcentaje.
“Consideramos que el gobierno también debería tener incentivos que ayuden a los empresarios porque, de lo contrario, si no hace su trabajo el empresario y por otro lado no existen estímulos… habrá de dos: o se encarece el producto o disminuye la utilidad, y si los márgenes de utilidad de la empresa ya están muy acotados, eso generará incremento de los precios y eso probablemente genere inflación”, consideró.
Al respecto, Josafat Gerardo Cervantes Pérez, vicepresidente general del CCPEP, comentó que México se encuentra en el lugar 54 a nivel mundial en productividad, por lo que si esta no se eleva, el impacto por la reducción de la jornada laboral a 40 horas será elevado.
No obstante, dijo que no solo el personal, sino también el gobierno y empresas son responsables de mantener u obtener mejores resultados en menor tiempo de trabajo.
Por su parte, Rosa Huepa Onofre, vicepresidenta de Desarrollo Profesional Continuo, manifestó que desde ahora los empresarios y el mismo gobierno deberían estar pensando en cómo hacer las mismas tareas en menos horas.
Comentó que si bien las horas extras podrían ser una solución, el pago de estas encarecería los costos de producción.
“No hay que dejarlo todo al último porque esto va a tener un costo… incluso el trabajador, con el tiempo extra, saldría más caro. Invitamos a todos los patrones a que hagan proyecciones financieras de cuál va a ser el impacto que podría tener esta reforma”.
La contadora abundó que en Chile y Colombia también están preparándose para la reducción de las horas de trabajo y se espera que a más tardar en 2026 y 2029, respectivamente, estén en 40 a la semana.
Durante la conferencia se destacó que en México el promedio de horas laboradas al año es de 2 mil 207 horas, superior a la media de mil 752 horas en países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Con información de: La Jornada de Oriente
No hay comentarios:
Publicar un comentario