sábado, 19 de julio de 2025

Caminemos Derecho - Entre el derecho al trabajo y el derecho de los “seres sintientes".


Por: José de Jesús Aguilar Carrasco


Ni duda cabe que una sociedad civilizada tiene varias formas de analizarse para poderse atribuir esa característica, la de “civilizada”. De ahí que a definirla como una sociedad moderna existe una amplia diferencia y muchas variables que poder tener en cuenta; una de ellas es precisamente la forma en como quienes integramos esas sociedades tratamos a los animales. 

En efecto, somos una especie más de las miles de los que constituimos la fauna de este cada vez más dañado planeta, con la única diferencia al parecer, del raciocinio y que estamos obligados a respetar a nuestros co planetarios para garantizar nuestra preservación y  la de todas las especies que existen, aún, en este mundo.

Se ha puesto de moda utilizar eufemismos, y no describir lo existente por su nombre, como recientemente se ha pretendido definir, cuando menos en el estado de Puebla, a los animalitos, y ahora se les denomina como “seres sintientes” de acuerdo al artículo 3º fracción II de la Ley de Bienestar Animal del estado de Puebla, que define a los animales como “Ser vivo pluricelular, sintiente, constituido por diferentes tejidos, con un sistema nervioso especializado que le permite moverse y reaccionar de manera coordinada ante estímulos”.

La definición en sí misma, pudiera ser objeto de otro análisis, sin embargo hay que comenzar a señalar que cuando menos, hasta este momento, la palabra “sintiencia” NO existe en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, por lo que su derivado “sintiente” tampoco, y por lo tanto no podemos tener una definición ad hoc por lo que es producto de una construcción política convenientemente generada para la protección de los animales. 

Nadie, en su sano juicio puede estar en contra de la protección de los animalitos, de ninguna especie, ello proyecta nuestra calidad de seres humanos, y la agresión hacia estos desde luego debe tener consecuencias que permitan que estas conductas desaparezcan.

Sin embargo el punto de toque no se encuentra en ello, sino en la “moda” de humanizar a algunas especies de animalitos y como ejemplos podemos establecer muchos a lo largo y ancho de la conducta social que se genera en nuestro país.

Una conducta social cada vez menos racional, y más controlada por los espacios de poder. 

En fin, como prolegómeno de esta colaboración habría que hacer estas referencias porque la parte importante surge en el hecho de que en próximos días se publicará en el Periódico Oficial del estado de Puebla la disposición de que en el Municipio de San Martín Texmelucan, será prohibido la utilización de caballos (animal históricamente utilizado para el tiro y trabajo de fuerza) para halar las carretas de basura que prestan un servicio de recolección sobre todo en la cabecera municipal, y aquí es donde viene la reflexión. 

Primero, la autoridad municipal debe recordar que la obligación constitucional de limpia, recolección, traslado, tratamiento y disposición final de residuos; es atribuida directamente por el artículo 115 constitucional a los Ayuntamientos. 

Segundo, que estos trabajos informales en los que cierto número de personas comenzaron a tener un ingreso recolectando y depositando en los centros de recolección la basura común de los habitantes de este municipio, le convino a la autoridad municipal en su momento pues se deslindó de alguna manera de su responsabilidad constitucional. 

Tercero, que a través de esta actividad se crearon cientos de empleos que permiten y han permitido durante muchos años, que las familias dedicadas a esta actividad puedan llevar al sustento a sus mesas. 

Ahora, la intención es a raja tabla prohibir la utilización de los semovientes, que por cierto es un concepto que si existe legal y lingüísticamente hablando, para continuar con la actividad de recolección de basura. 

La pregunta es, ¿la autoridad municipal ya estableció una política pública real, en donde se substituyan los animalitos por algún otro mecanismo de tiro o de recolección de basura de esas personas que han dedicado su tiempo a esta actividad? O solo se va a limitar a prohibir. 

La pregunta es, ¿en caso de terminar con esta actividad, la autoridad municipal ya estableció una alternativa de trabajo para todas aquellas personas que han dedicado su tiempo a esta actividad? O solo se va a limitar a prohibir. 

La pregunta es, ¿la autoridad municipal tiene la capacidad operativa y técnica para recolectar toda la basura que se genera en el municipio y que en su momento recolectaban estas personas a través de sus carretas? O solo se va a limitar a prohibir. 

En un municipio donde los niveles de delincuencia son extremadamente preocupantes, habría que analizar si cerrar fuentes de trabajo sería la mejor opción o las acciones que se emprenden solo se ejecutan por moda o por quedar bien. 


Finalmente, desde el punto de vista legal existe una colisión de derechos entre los derechos de los animalitos a no ser maltratados, a tener una vida digna, a que sean respetados en su integridad VS el derecho al trabajo y al sustento legal y digno que pueden tener las personas que se dedican a la recolección de basura y ello no existe otra forma de resolverlo que a través de la autoridad jurisdiccional en un ejercicio de ponderación, pero eso, también puede ser materia de otra colaboración. 

Entendemos que se deben proteger todos los derechos, pero antes de ejercer una acción de bote pronto, se debe realizar un análisis de todas las variables que puede traer consigo una decisión de gobierno. Política pública, no lo es, pues de haberlo establecido de esta manera, las preguntas planteadas en esta colaboración habrían sido no solamente respondidas en el papel, sino resueltas en la materialidad de los hechos. 

Que continúen las acciones para la protección de todos los animales de nuestro entorno mismo y no solo de ellos, sino de todos los seres vivos diferentes a los seres humanos, quienes tanto daño le hemos hecho al planeta, pero, que no sea por moda, que no sea con eufemismos, que sea, por rescatar este mundo tan desviado de su esencia. Mientras ello ocurre, te invito a que CAMINEMOS DERECHO. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario